La horrible muerte de Patrick Lyoya a manos de un oficial de policía de Grand Rapids no solo fue evitable, sino predecible. GRPD tiene una larga historia de vigilancia racista. El departamento se basa en un enfoque de seguridad pública basado únicamente en la aplicación de la ley, tolera soluciones violentas para situaciones no violentas y no responsabiliza a los oficiales ni a las personas a las que informan. El Sr. Lyoya, padre de dos niños pequeños, estaría vivo hoy si los funcionarios de la ciudad y el GRPD hubieran escuchado los llamados de mucho tiempo de activistas de reinvertir en las comunidades de color, en lugar de vigilarlas en exceso. La siguiente es una línea de tiempo que establece algunos de los ejemplos más flagrantes de la larga historia de abuso de personas negras y morenas por parte de GRPD, y la peligrosa falta de responsabilidad que permite que esos abusos continúen.
junio de 2014
Un agente del Departamento de Policía de Grand Rapids golpea brutalmente a un joven negro de 15 años aporreado con una lampara de mano.
abril 2015
La ACLU demanda al GRPD por su programa orwelliano de "carta de no traspaso" que se enfocaba en personas como Jacob Manyong, un inmigrante africano arrestado y acusado de traspaso porque la llanta trasera de su automóvil cruzó la [línea de] propiedad de un negocio privado mientras conducía en un estacionamiento público adjunto. El análisis de un experto externo de los registros de GRPD revela que el 70% de las detenciones iniciadas por oficiales bajo el programa fueron de personas negras en una ciudad donde, según los datos del censo más reciente, solo el 18% de la población es negra. Tanto los tribunales estatales como los federales determinaron que los arrestos en el marco del programa eran inconstitucionales.
septiembre 2015
Los oficiales de GRPD responden a quejas por ruido de una fiesta en una casa arrestaron por la fuerza al anfitrión y a otros ocho, todos residentes negros. Un invitado fue electrocutado. Seis de las nueve personas detenidas presentaron denuncias por fuerza excesiva ante el GRPD. Hasta 35 oficiales llegan a la escena al mismo tiempo.
marzo 2017
Oficiales del GRPD se detienen y apuntan con armas de fuego a cinco niños negros desarmados, de 12 a 15 años.
abril 2017
Un estudio muestra que los conductores negros tienen más del doble de probabilidades de ser detenidos por el GRPD que conductores blancos.
diciembre 2017
Un oficial del GRPD apunta con un arma de fuego y esposa a una niña negra desarmada de 11 años, Honestie Hodges.
agosto 2018
Al menos seis patrullas del GRPD y otros tantos agentes esposaron a punto de pistola a mellizos desarmados de 11 años y a un niño de 17 años, todos niños negros.
septiembre 2018
Un oficial del GRPD dispara a un niño negro de 14 años que juega con una pistola BB de aire.
octubre 2018
Una niña negra de 12 años es esposada a punto de pistola por un oficial del GRPD, lo cual el jefe de policía describe como "apropiado".
noviembre 2018
Un capitán de policía del GRPD llama erróneamente al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas sobre Jilmar Ramos-Gomez, un veterano condecorado del Cuerpo de Marinas que fue arrestado con su pasaporte estadounidense después de un incidente de salud mental. Como resultado, el Sr. Ramo-Gómez pasa tres días en detención de inmigración.
marzo 2019
Dos adolescentes latinos, que cruzaban la calle fuera del cruce peatonal, son retenidos a punta de pistola por un oficial del GRPD.
marzo 2019
Los oficiales del GRPD sacan a un hombre negro de un automóvil y lo golpean.
marzo 2019
El Departamento de Derechos Civiles de Michigan celebra audiencias sobre la discriminación racial por parte del GRPD. La investigación del MDCR aún no ha concluido.
septiembre 2019
Después de que un tribunal dictaminara que los registros de una línea telefónica secreta del GRPD, que los oficiales creían que no se estaban grabando, estaban sujetos a solicitudes de registros públicos, los administradores de la ciudad de Grand Rapids borraron esas grabaciones durante el fin de semana en lugar de publicarlos.
marzo 2021
Un oficial del GRPD golpea a un hombre negro en la cara en una parada de tránsito y le dice: "Tuviste suerte de que no te mataron".
noviembre 2021
La Corte Suprema de Michigan escucha un caso que desafía el programa de fotografía e impresión del GRPD, según el cual a Keyon Harrison, un joven negro de 16 años, se le tomaron las huellas digitales después de que los oficiales del GRPD pensaron que era sospechoso que le ayudara a otro joven a llevar un camión de bomberos de juguete, y Denishio Johnson, un joven negro de 15 años, se le tomaron las huellas digitales de manera similar a pesar de que nunca fue acusado de ningún delito. Un análisis experto del programa encontró que el 75% de los encuentros iniciados por oficiales involucraron a personas negras, mientras que solo el 15% involucró a personas blancas. Esto en una ciudad donde, según la Oficina del Censo de los EEUU, más del 65% de la población es blanca y solo el 18% es negra. Está pendiente una decisión.
diciembre 2021
Un oficial del GRPD dispara accidentalmente su arma mientras persigue a un hombre negro, de quien se sospecha erróneamente que ha robado un vehículo.
marzo 2022
Una mujer embarazada aterrorizada audiblemente le pide a más de media docena de oficiales del GRPD que dejen de apuntarla con sus armas de fuego frente a su casa, después de que el GRPD persigue a su novio por conducir sin placas en su automóvil. Son una pareja negra.
abril 2022
Patrick Lyoya, un inmigrante congoleño de 26 años es matado por Christopher Schurr, un oficial de policía de Grand Rapids, luego de una parada de tránsito supuestamente realizada debido a un problema con el registro. El video muestra al Sr. Lyoya saliendo de su vehículo, aparentemente confundido. El oficial le puso una mano encima durante un intercambio verbal, del cual el Sr. Lyoya intenta alejarse. Debería haber terminado allí. En cambio, el oficial sigue y aborda al Sr. Lyoya, saca una pistola paralizante mientras luchan, golpea al Sr. Lyoya, lo inmoviliza y luego lo mata con un tiro a quemarropa en la parte posterior de la cabeza.
La rendición de cuentas requiere no solo una transparencia total, sino un compromiso de cambiar radicalmente la actuación policial para que no se pierdan más vidas. La ciudad de Grand Rapids y el GRPD deben escuchar las voces de la familia del Sr. Lyoya y quienes están al frente de esta lucha sobre lo que necesitan en este momento de crisis. Hacemos un llamado urgente a la ciudad de Grand Rapids, al GRPD y funcionarios gubernamentales para que tomen las siguientes medidas inmediatas:
- Se debe designar a un fiscal fuera del condado de Kent, que no trabaje regularmente con el GRPD, para manejar este caso, como es requerido legalmente en muchos estados y es ampliamente reconocido como la mejor práctica;
- La comunidad debe tener un lugar en la mesa en las negociaciones en curso sobre los contratos sindicales de la policía del GRPD, que durante demasiado tiempo han protegido a los oficiales de la rendición de cuentas y que no reflejan las prioridades de la comunidad sobre cómo lograr la seguridad pública en Grand Rapids;
- Tanto la Junta Civil de Apelaciones como la Oficina de Supervisión y Responsabilidad Pública deben recibir la autoridad, los recursos y los fondos para brindar una verdadera supervisión civil y poder generar un cambio real; y
- La Ciudad y el GRPD deben respetar el derecho constitucional de todas las personas a protestar por esta tragedia y ejercer su libertad de expresión sin violencia, amenazas o intimidación.
Avanzamos en solidaridad con nuestros socios de la coalición, Greater Grand Rapids NAACP, LINC UP, Urban Core Collective y Michigan Immigrant Rights Center.